martes, 8 de mayo de 2018

Espejos del Paraíso

Al norte de Lima a la altura del Kilómetro 135 de la Panamericana Norte en la provincia de Huacho, se encuentra una escena que se repite pocas veces en la naturaleza, restos arqueológicos del 2500 a.c., enormes albuferas llenas de fauna  vegetación, playas casi sin olas como si fuesen una laguna y con la arena totalmente limpia, aves  cangrejos en grandes cantidades a tu alrededor, un sitio como pocos en la tierra. 




ALBUFERAS EL PARAÍSO

Las albuferas son cuerpo de agua que se forman por las filtraciones del agua de mar y que forman una suerte de lagunas que se adentran en la Costa. Humedales del Paraíso, Bandurria, Huacho, Perú.

El Humedal del Paraíso o Playa chica, es el resultado de las filtraciones agrícolas de la irrigación Santa Rosa. 



La longitud máxima es de 8 km con un ancho variable entre los 100 m  los 2 km (superficie total: 440 ha) dividida en dos espejos de agua o lagunas (Norte y Sur), con una profundidad máxima es de 1, m. Es la más extensa de la zona, actualmente aquí se puede apreciar desde el mirador del sitio arqueológico Bandurria una gran variedad de aves migratorias  aves residentes que juguetean en el lugar. Además se puede apreciar la hermosa playa chica que está a pocos metros de la laguna, de esta manera la convierte en un bello paisaje. Se encuentra a 1 minutos de la ciudad de Huacho. 

Casi al extremo sur de la albufera norte, se encuentra los restos arqueológicos de Bandurria. Adyacente a la playa, su profundidad está influenciada por las mareas, y en las muy altas, el mar invade la parte sur de la laguna, creando zonas de sedimento de sal. Se han identificado 19 especies de plantas (11 terrestres  8 acuáticas), aunque aún faltan mayores investigaciones. Las aves representan la fauna más abundante del humedal, con 106 especies (64 residentes  42 migratorias). Hay dos especies de peces y una de reptil. El humedal es una importante área de descanso  alimentación de aves migratorias, forman parte del corredor biológico de la Costa Central del Perú.

En el lugar se encuentran varios tipos de hábitats: Totoral, Gramadal, Zona ribereña, Litoral, creando un oasis en medio del desierto costeño.




OBSERVACIÓN DE AVES Y BIODIVERSIDAD

Por ser muy apartado, es el mejor humedal para observar aves raras en la Región Lima y puede encontrar especies muy difíciles de observar en otros lugares. 

Recorriendo los bordes de las lagunas e islotes, puede encontrar al Peruvian Tern, Royal Tern, Elegant Tern, Cinnamon Teal, Great Grebe, Chilean Flamingo, American Oystercatcher, Blackish Oystercatcher, Franklin's Gull entre otros. En los arenales puede ver al Peruvian Thick-knee.

Las albuferas El Paraíso es un refugio natural casi intacto para miles de aves, en la costa de Huacho. Un grupo de ambientalistas y las autoridades locales están decididos a protegerla desde ahora, para no lamentarse después. Es una experiencia inédita digna de imitar pues existen santuarios que no se recuperan de una profanación. Paraíso, una albufera laguna cercana al mar en la costa de Huacho, tiene en cambio otra historia que contar. No ha tenido esa racha de ataques que deja lugares muertos o agonizantes, pero años atrás era zona predilecta de cazadores furtivos que llegaban para disparar a mansalva sobre las aves del lugar. Por los pliegues de arena todavía negrean decenas de cartuchos usados. Y, sin embargo, es todavía un área inmaculada. Hay expertos que la consideran el segundo humedal más importante de Lima después de los Pantanos de Villa. 

Está tan intacta que resulta peligroso: una tentación para los depredadores ecológicos. "De hecho, es el humedal más importante de la costa central que no ha sido alterado". El escenario en que lo dice es su comprobante: sólo colinas de arena rodean la laguna, el mar la cubre cada cierto tiempo, por marejadas,y a lo largo de sus siete kilómetros es posible ver miles de aves que la han tomado como su refugio. Hasta donde se ha estudiado, ese cobijo alcanza para 125 especies, de las cuales 10 son endémicas. Los especialistas en ecología y ambiente están encantados con este lugar. Uno de sus tesoros es un ave llamada el gaviotín peruano, que sólo habita en Paraíso. La Bird Life Internacional una organización dedicada a proteger las aves en todo el mundo, considera a esta especie en peligro de extinción. Pero los aficionados al birdwatching esa especie de safari inofensivo para ver aves, gozan también con el ostrero blanco, la garza blanca o el chorlo ártico. 

La laguna está separada de la orilla marina por 250 m. y sus aguas son salobres. Esta laguna presenta extensos espejos de agua y vegetación herbácea en sus márgenes, hallándose totorales, venga de ciperáceas y gramadales. En el extremo norte se concentran las mayores formaciones vegetales, que a su vez presenta la mayor diversidad de fauna. Actualmente, existen pocas viviendas apostadas en uno de los bordes de la laguna, cuyos moradores tienen como principal actividad económica la utilización del junco y la totora con fines artesanales. Las amenazas más severas para la conservación de las aves, y la biodiversidad en general, de este lugar son la caza furtiva, la perturbación por ruido, la quema ocasional de vegetación y la presencia de desechos, producto del creciente urbanismo cercano y el turismo. 

El humedal de "Paraíso" presenta dos grandes áreas: una con cuerpos de agua de poca profundidad, con influencia mayor de aguas marinas, vegetación de llanura salina y avifauna vinculada a dichas condiciones; y otra con cuerpos de agua más profundos, con una influencia de agua dulce, vegetación emergente, ribereño y lagunar y avifauna relacionada a estos hábitats. Esta condición hace que en comparación con el humedal próximo de "Medio Mundo", Lagunas Paraíso presenta diversidad en hábitat, propicios para una mayor diversidad de avifauna y otros organismos. La presencia de actividad extractiva de Junco y totora, este último en mucho mayor cantidad que en "Medio mundo", aparentemente no causaría impacto en la reducción de hábitat para las especies de aves por su gran extensión, sin embargo, se recomienda hacer monitoreo sobre los impactos en anidación. 

Se observa también la presencia de la "polilla de la Totora y junco", así como el "carboncillo" o melaza. Un hecho preocupante es la presencia de veraneantes en buen número sin ningpun control o guiado, lo que impacta por la perturbación a las aves, especialmente a las parihuanas, la actividad de pesca en la zona extrema sur, donde existe una desembocadura natural de las aguas de la laguna, se sabe que en ciertas épocas la laguna pierde contacto con el mar en esta zona. Supuestamente por la disminución del nivel de agua. En particular puede existir la hipótesis de disminución del nivel, lo que hay que saber es si las causas son naturales o por acciones antrópicas. De acuerdo a datos preliminares respecto al agua podemos decir que existe una sobre carga orgánica, lo que amerita hacer nuevos estudios. Los derechos de propiedad no están claros, la ocupación del territorio actualmente fragmenta el entorno, más adelante esto favorecerá una presión sobre el humedal y si se da el cambio de uso, habrá contaminación y degradación ambiental. 

El reciente descubrimiento, muy trascendente, de los restos arqueológicos de bandurria localizados entre los cuerpos de agua del humedal actual; pone de manifiesto una característica relevante sobre el valor de estos ecosistemas y de su importancia en la construcción de la cultura y la civilización. El hallazgo de tejidos de algodón y cestería de junco, con una antigüedad de 5000 años, es un antecedente que la población actual ha tomado como un referente de vida. La extracción de junco y totora se vincula, en Huacho, con una experiencia de producción y exportación de artesanía de junco, y por supuesto es otra potencialidad de gran valor que sitúa a este humedal, como el de mayor riqueza y diversidad socio-ambiental. El gobierno Regional, La Municipalidad Provincial de Huaura, La Universidad Nacional de Huacho, El Proyecto Arqueológico Bandurria, entre otros actores locales constituyen la base de una experiencia de manejo y gestión que podría establecer un referente para el diseño de estrategias de conservación y uso sostenible de un ecosistema natural y un sitio arqueológico como unidad sistemática, en el marco de un planteamiento de ordenamiento territorial y manejo de cuencas hidrográficas



El reciente descubrimiento, muy trascendente, de los restos arqueológico de Bandurria localizados entre los cuerpos de agua del humedal actual; pone de manifiesto una característica relevante sobre el valor de estos ecosistemas y de su importancia en la construcción de la cultura y la civilización. El hallazgo de tejidos de algodón y cestería de junco, con una antigüedad de 5000 años, es un antecedente que la población actual ha tomado como un referente de vida. La extracción de junco y totora se vincula, en Huacho, con una experiencia de producción y exportación de artesanía de junco, y por supuesto es otra potencialidad de gran valor que sitúa a este humedal, como el de mayor riqueza y diversidad socio-ambiental. El Gobierno Regional, La Municipalidad Provincial de Huaura, La Universidad Nacional de Huacho, El Proyecto Arqueológico Bandurria, entre otros actores locales constituyen la base de una experiencia de manejo y gestión que podría establecer un referente para el diseño de estrategias de conservación y uso sostenible de un ecosistema natural y un sitio arqueológico como unidad sistémica, en el marco de un planteamiento de ordenamiento territorial y manejo de cuencas hidrográficas. En perspectiva se trata de consolidar la red de actores, facilitando los procesos de planificación y gestión para la construcción de una unidad de conservación que integre el valor de la naturaleza y la cultura con un enfoque sistémico y una visión de desarrollo humano sostenible. 

El arqueólogo Alejandro Chu, trabaja desde hace tiempo en el proyecto arqueológico Bandurria, que es la antigua zona habitada en las inmediaciones de Paraíso (3.500 a 1.800 a.C.). Fue una aldea de pescadores que vivieron de la laguna. En sus 23 hectáreas de extensión se ha encontrado desde textiles y herramientas hasta edificaciones de barro. Los estudios de la zona se iniciaron en los años setenta, pero todavía arrojan datos interesantes: en lo que va de su trabajo.


¿CÓMO LLEGAR?
Es muy accesible y se llega desde Lima, a través de la carretera Panamericana Norte. En el Km. 140 hay un desvío hasta la zona arqueológica de Bandurria. 2 Km después llegamos la Zona Arqueológica.
Para ingresar a la zona de las Lagunas y avistar aves, debe ingresar por desvío del Km 136.6 e ingresar 6.7 Km.

POLÍTICAS
Para el ingreso a la playa y los bordes del humedal, no es necesario pagar ninguna tarifa. 
Es necesario abonar una cuota de ingreso para visitar la Zona arqueológica.

BIBLIOGRAFÍA
INRENA (2004) Propuesta de asignaciones de agua en bloque – volúmenes anuales y mensuales para la formalización de derechos de uso de agua en el valle Huaura. PROFODUA-IRH.

MINAG (2008) Delimitación y codificación de unidades hidrográficas del Perú. Resumen ejecutivo pp. 36. http://www.mincetur.gob.pe/TURISMO/OTROS/inventario%20turistico/Ficha.asp?c od_Ficha=3368

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